Las ecografías en el primer trimestre del embarazo son definitivamente las más importantes de todo este maravilloso proceso. Los motivos son diversos, pero los resumiremos en los siguientes tres:
- La ecografía de viabilidad embrionaria (antes de las 11 semanas), es clave para poder confirmar la localización del embarazo. ¿Por qué es necesaria dicha confirmación? Debido a que pueden existir embarazos fuera, o en localizaciones atípicas, del útero, que son llamados embarazos ectópicos. ¿Cuál es el peligro de estos embarazos? La posibilidad de lesionar tejidos y órganos, que pueden llevar a una hemorragia y a una cirugía de emergencia.
- Las ecografías del primer trimestre nos permiten evaluar tempranamente la evolución natural de un embarazo; así como determinar el número de embriones y detectar situaciones que podría comprometer el desarrollo normal de la gestación
- La ecografía de las 11 a 14 semanas (mal llamada ‘genética’), es la ecografía ideal para datar el embarazo y planificar todos los cuidados que necesitamos durante esta linda etapa. Muy aparte de buscar malformaciones y poder interpretar riesgos, esta ecografía debe de ser el pilar para otorgar el tiempo adecuado a la gestación y poder corregir o crear, de ameritar, la fecha de última menstruación, que es un dato clave para todos los cálculos.
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